Con la finalización de las obras de ampliación del edificio Villanueva en el área en torno al claustro de los Jerónimos, el Ministerio de Cultura convierte en realidad la reforma más significativa de las que se han realizado en el Museo del Prado en sus casi doscientos años de existencia. Es la primera ampliación construida en espacios adyacentes a la sede histórica del museo.
El nuevo edificio creado en torno al claustro de los Jerónimos, unido de forma ingeniosa y bajo rasante con el edificio histórico de Villanueva, incrementa la superficie del museo en más de un 50 %. La ampliación supone un aumento de 15.715 m2 útiles, respecto a los 28.600 m2 con los que contaba el edificio original.
El nuevo Museo del Prado cuenta con cuatro espaciosas salas específicamente concebidas para exposiciones temporales; con un Claustro integrado como espacio singular utilizable como sala de exhibición de escultura; con un nuevo Auditorio con capacidad para más de 400 personas; con un gran Hall de acogida; con mayores y mejor equipados depósitos para obras de arte; con espacios idóneos para restauración de obras y estudios técnicos; con una nueva tienda-librería y una nueva cafetería-restaurante....
Al edificio de Jerónimos se ha incorporado una monumental escultura de bronce, obra de la escultora Cristina Iglesias, que abre el paso al nuevo Prado, enriqueciendo sustancialmente el conjunto en un sorprendente diálogo entre obra plástica y arquitectura.